La contaminación electromagnética puede ser invisible pero tiene consecuencias en la salud de las personas y otros ámbitos, aunque es muy difícil evitarla por completo, se pueden hacer muchas cosas para reducirla considerablemente:
Poner el móvil en modo avión cuando se pueda, sobre todo por la noche.
Usar cable para las conexiones a Internet en casa, en vez de la wifi.
No abusar de los auriculares y otros aparatos inalámbricos.
No poner lavavajillas, lavadoras, microondas y otros aparatos electrónicos cerca de las habitaciones.
No usar el móvil cerca de los bebés y los niños.
No usar vigilabebés inalámbricos.